Acusaciones de Abuso Sexual en el Equipo de Washington
El dia de hoy el Washington Post publicó un artículo donde expresa la problemática de la mala conducta en el lugar de trabajo y el acoso sexual dentro de la organización de Washington.
El artículo no hace específicamente acusaciones contra el propietario del equipo Daniel Snyder. El artículo cita a 15 mujeres diferentes que dicen que fueron acosadas sexualmente mientras trabajaban para el equipo. Entre los acusados de acoso sexual se encuentra Larry Michael, quien es locutor de radio del equipo, y repentinamente esta semana anunció que dejaría el equipo.
El Washington Post informó que las mujeres que trabajaban en el equipo, al ser entrevistadas "lloraron al darse cuenta de que su trabajo soñado de trabajar en la NFL se produjo con lo que caracterizaron como acoso sexual implacable y abuso verbal que fue ignorado y, en algunos casos, tolerado, por ejecutivos del equipo superior ".
También se mencionó en dicho artículo a dos empleados que fueron despedidos recientemente, el director de personal Alex Santos y el asistente de personal Richard Mann II. Se intentó tener una declaración del propietario Daniel Snyder sin embargo se negó, hasta el momento no hay acusaciones concretas o alguna prueba fidedigna de lo sucedido, por lo que esto será un tema severo que la NFL mantendrá para esclarecer todo, así que tarde o temprano Snyder dará la cara.
14 de las 15 ex empleadas que alegan el acoso sexual se han negado a ser identificadas esto, por temor a que pueda haber consecuencias legales en su contra por cuestiones de confidencialidad en sus contratos. Esto además de que pueda incluir amenazas.
Dicho esto, es posible que esto se resuelva con una fuerte cantidad de dinero como indemnización o simplemente lo que corresponda como despido.
Aunque el propietario Snyder aparentemente nunca fue blanco de ninguna acusación en el que resultara involucrado en cuestión de saber y no haber hecho nada, el cuestionamiento es si Snyder, como líder de la organización, es responsable del comportamiento de sus ejecutivos y hasta qué punto se vuelve tan obviamente mal empleada con conductas reprobables la cultura de la organización que la persona responsable de toda la franquicia es necesariamente responsable.
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